El aguacate es el nombre tanto del árbol frutal como el de su fruto. Como árbol es extremadamente vigoroso, pudiendo superar con facilidad los 30 metros de altura. Sin embargo, su sistema radicular es bastante superficial.

Se cultiva en climas subtropicales o muy cálidos. En el caso de climas mediterráneos, como en España, se centra en aquellas zonas sin riesgo de heladas.

Su nombre en español de aguacate proviene del azteca ahuacatl (testículo), si bien, los primeros españoles, tras su llegada a América, lo bautizaron con el nombre de Pera de las Indias, por su parecido con las peras españolas. Los estudios, que lo sitúan como fruto comestible, se remontan a unos 8000 años a. C. en México y entre 3000 a 4000 a.C. en Perú.

La planta de Persea americana.

Aunque en algunas partes de América del Sur se conoce como Palta, su nombre más popular es aguacate, siendo su nombre científico Persea americana, pertenece a la familia Lauraceae y es originario del sur de México, Colombia y Venezuela.

Como avanzamos, es un árbol que alcanza grandes dimensiones, con un sistema radicular bastante superficial. Es un árbol perenne y sus hojas crecen de forma alterna, son pedunculadas y de aspecto muy brillante.

Sobre la floración del aguacate.

Sus flores poseen los dos sexos y salen en inflorescencias formando racimos subterminales. Pero para evitar su autofecundación, estos órganos abren en momentos distintos, separados en el tiempo. Así, los órganos femeninos y masculinos son funcionales en diferentes tiempos dentro de una misma flor.

Bajo esta premisa, podemos encontrar que las plantas de aguacate se venden según el comportamiento de la inflorescencia, manteniendo dos tipos: A y B. En ambos tipos, las flores abren primero como femeninas, cierran por un período fijo y luego abren como masculinas en su segunda apertura.

Por lo tanto, para obtener una buena producción, necesitaremos como mínimo una planta de cada tipo. En el caso de que nuestra plantación fuese muy numerosa, la proporción entre este tipo de plantas debe de ser de 4 a 1, donde la mayor población será de la variedad deseada.

El aguacate es un árbol muy curioso. Cada ejemplar en estado adulto puede llegar a producir hasta un millón de flores. De ellas, tan solo el 0,1% se transforman en fruto finales comestibles. El resto caerán por abscisión, ya sea en estado floral o en pequeños frutos en desarrollo.

Una vez fecundadas y llegado a buen final, el fruto es una baya unisemillada, oval, de superficie lisa o rugosa, según la variedad. Sus dimensiones varían según la variedad, siendo un tamaño habitual de 5 a 6 centímetros de longitud. Su peso normal oscila entre 200 a 400 gramos, aunque pueden encontrarse piezas que superan más de un kilo. Su corteza es gruesa y dura, de color verde, cuyo tono y textura superficial depende de la variedad. En su interior, la pulpa es aceitosa de color crema a verde amarillento. Esta rodea su única semilla, que es redondeada, de color pardo más o menos claro y un grosor de 2 a 4 centímetros.

Curiosamente, el envero solamente se produce en algunas variedades y la maduración del fruto no tiene lugar hasta que este se separa del árbol.

Técnicamente, los órganos fructíferos del Persea americana son los ramos mixtos (el más importante), chifonas y ramilletes de mayo.

La producción de aguacate en España.

Durante estas últimas décadas, la producción de aguacate en España no ha parado de crecer, hasta convertirse en el principal país productor de la Unión Europea.

Con respecto a la superficie española dedicada al aguacate, esta ha aumentado en un 7% en 2023, situándose en unas 24.000 hectáreas. Esto implica una producción que supera las 108.000 toneladas de este fruto.

Su cultivo del aguacate se centra principalmente en la ciudad de Málaga, especialmente en la comarca de la Axarquía, siguiéndole en importancia las plantaciones en Granada y Canarias, ya que necesita un clima subtropical. Aun así, se están realizando plantaciones importantes en la Región de Murcia, Comunidad Valenciana y Sur de Cataluña.

Con esta superficie de cultivo a lo largo de todo el arco mediterráneo español, la temporada del aguacate va dependiendo de su zona de cultivo, siendo en su conjunto bastante extenso, aunque se concentra en un periodo que comprende entre diciembre y junio.

En cuanto a las variedades de aguacate más cultivadas en España, se encuentran la principal llamada Hass (la más conocida y comercializada), seguidas de Lamb Hass (subvariedad perteneciente a Hass), Fuerte (de raza mexicana-guatemalteca), Reed (raza guatemalteca), Bacon (híbrido de raza guatemalteca-mexicana y muy cultivada en España), Zutano (híbrido mexicano-guatemalteco) y Pinkerton, una variedad híbrida guatemalteca-mexicana.

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