Para el cultivo de albahacas gigantes, lo primero que tenemos que saber es que hay muchas variedades de albahaca y no todas ellas nos van a servir.

Son muchas las plantas asociadas directamente con ciertas fiestas populares. Un ejemplo de ellas es la albahaca y las fiestas de las “alfàbegues de Bétera” (albahacas de Bétera). Bétera es una localidad valenciana (España) y cada 15 de agosto, día de la Asunción, las albahacas gigantes de más de 2,5 metros de altura y el hombre se reparten el día grande de esta ciudad.

Si queremos realizar un cultivo de albahacas gigantes, lo primero es elegir variedades de porte y hojas grandes, realizando su cultivo en el huerto urbano de terraza o balcón, ya que en la modalidad de campo no podremos realizarlo en las condiciones adecuadas.

Estas albahacas, son cultivadas con extremos cuidados y bajo fórmulas magistrales secretas para conseguir alcanzar las albahacas más grandes y en mejor estado.

El proceso de cultivo de albahacas gigantes dura unos cuatro meses y medio (España). Se suelen sembrar hacia finales de marzo. Una vez germinadas se seleccionan las más vigorosas y se trasplantan al contenedor definitivo, que pondremos en un lugar con buena iluminación y protegido de los vientos.

Sobre él, se colocarán unas guías como estructura vertical y sobre esta, se teje una especie de tela de araña con hilo para enderezarlas las albahacas durante su crecimiento a lo alto.

Durante todo este tiempo, tendremos en cuidado de podar las flores para alargar aún más las ramas. Cada día se las riega entre diez y doce veces según la climatología y estado de crecimiento, alimentándolas con un abono especial… como “receta secreta”. Recordemos que la albahaca normal, no supera los 50 centímetros de altura.

Podéis probar con abonos ricos en nitrógeno con aporte de materia orgánica, sin olvidar el resto de macro y microelementos.

A mediados y finales de verano, tendremos unas albahacas gigantes con la que sorprenderemos a nuestros amigos.

Alrededor del cultivo de albahacas gigantes, está como decimos fiestas populares como las “alfàbegues de Bétera”. Según se dice, está vinculada con los antiguos ritos de fertilidad paganos. La jornada se inicia con la recogida de las dos trabajadoras solteras elegidas, quienes ataviadas con indumentaria de valenciana y acompañadas por familiares y amigos, llegan hasta l’Hort de les Alfàbegues (el huerto de la albahacas), para dar comienzo al ritual. La comitiva parte con las plantas seleccionadas dispuesta a recorrer las calles del Calvari, la de Colón y la de Les Alfàbegues.

Por los flancos de la calle, caminan los ‘majorals’ con sus camisas floreadas, los pantalones, el fajín negro, las ‘espardenyes de careta’… tal y como llevaban los antiguos labradores. Ellos se encargan de darle color al festejo y son los encargados de amenizar el paseo. Para ello, durante el recorrido lanzan al aire varias toneladas de confeti.

Esta procesión pagana se mueve al ritmo de la música, la que surge del tabal y la dolçaina, además de las bandas de música que escoltan a las trabajadoras. Este día está todo prácticamente permitido.