Saber cuándo y cómo sembrar las habas en nuestro huerto urbano es fundamental para tener el éxito en su cultivo prácticamente asegurado.

Cuándo sembrar las habas, en el hemisferio norte y en concreto en España, depende en gran medida de las temperaturas invernales. En términos globales, de septiembre a marzo.

Cuando los inviernos son suaves sin riesgo de heladas, podemos realizarla a principios o mediados de otoño, cuando las temperaturas más calidad han comenzado a desaparecer.

Si hay riesgo de helada porque los inviernos son muy fríos, lo mejor es esperarse al final de este o principios de primavera.

Este concepto sirve tanto para su cultivo en huerto urbano de campo como de terraza o jardín, aunque sabemos que por una serie de cuestiones, en plena ciudad las temperaturas suelen ser algo más suaves que en pleno campo.

Respecto a cómo sembrar las habas, sí diferenciaremos en cada caso en función del tipo de huerto urbano que se trate. Pero como elemento en común, pondremos las semillas de las habas a remojo durante 24 horas antes a su siembra.

Huertos urbanos de campo
Llegado el momento, habremos preparado el suelo previamente, limpiándolo de malas hierbas y cavándolo para esponjar el terreno. Hay quien opta por da un riego y sembrar con la tierra de sazón, y quien siembra e inmediatamente les da un riego.

En ambos casos sembraremos en líneas de surcos separados entre 50 a 80 centímetros, espaciando las semillas entre 30 y 50 centímetros. Estas deben quedar enterradas unos 5 centímetros.

Las semillas de habas pueden mantener su poder germinativo durante 4 ó 5 años. Tras la siembra germinará en unos 10 días.

Huertos urbanos de terraza o balcón
En este caso, elegiremos macetas o contenedores de un diámetro mínimo 30 a 40 centímetros.

El sustrato elegido es el sustrato de plantación, al que además le añadiremos entre un 30 a 50% de tierra de campo. Le favorece las tierras frescas y con algo de arcilla.

Regaremos el sustrato y con los dedos crearemos tres orificios en triangulo de unos 5 centímetros de profundidad.

En cada uno de ellos dejaremos caer una semilla plana. Seguidamente los taparemos y compactaremos. Regaremos una vez más y nos aseguraremos de mantener el sustrato húmedo hasta su germinación.

En todos los casos, la siembra de las habas debe realizarse a pleno sol.