El mes de febrero en España es un mes inquietante en lo que se refiere al calendario de trabajos del huerto urbano. Estamos ante el inicio de un proceso de cambio climatológico y esto nos va a condicionar dicho calendario.

Por ello, establecer un calendario de actividades es un poco complicado, ya que la climatología es muy variable en función de la zona en la que nos encontremos. Estas diferencias pueden ser muy marcadas entre zonas y además, muy es cambiante de un año a otro.

Por ejemplo, mientras que en la costa mediterránea e Islas Baleares comienzan normalmente las buenas temperaturas, en el interior peninsular siguen con los fríos intensos. En el norte español se alternan temporales y en el caso de las islas Canarias, gracias a su clima prácticamente tropical, gozan de temperaturas plenamente primaverales. Por estas circunstancias no debemos precipitarnos.

Si la zona es todavía fría, podemos seguir con aquellas labores que deberíamos haber realizado durante los dos meses anteriores: terminar con las podas de frutales, remover los terrenos del huerto sin vegetación para su preparación, etc. y sólo si las condiciones son más favorables, podemos iniciar otras tareas más propias del inicio de la primavera, sabiendo que aunque los días sean cálidos… las noches suelen ser muy frías e incluso presentarse fuertes heladas.

Acelgas amarillas

Si no lo hemos hecho ya, es un momento límite para realizar en las plantas aromáticas y culinarias, como por ejemplo el tomillo, el romero, la salvia, la lavanda, etc. su poda, saneamiento y preparación para que broten con fuerza y bien formadas en cuanto suban un poco las temperaturas.

Para especies como las Menthas y Stevia rebaudiana que pierden todas sus hojas, empezarán a brotar a lo largo de este mes. Si aun no lo han hecho, es un buen momento para echarles un poco de tierra por encima.

Verduras y hortalizas en el huerto urbano en febrero

Si disponemos de un pequeño invernadero con calefacción, podemos ir realizando las siembras para adelantar en lo posible su plantación en primavera.

En el caso de cultivar en invernadero, deberemos ventilarlo diariamente de 1 a 3 horas durante el día como mínimo para evitar los excesos de humedad y favorecer la renovación del aire. También tendremos cuidado por si la lluvia ha limpiado excesivamente los cristales o plástico de cubierta, en volverlos a pintar de nuevo para tamizar la luz ya que el exceso, puede dañar las plántulas recién germinadas.

Si el tiempo lo permite, también podemos realizar los primeros semilleros al aire libre, aunque siempre protegiéndolos si llega el mal tiempo. Las especies indicadas para esta época del año son las acelgas, achicoria, espinaca, guisantes, habas, lechugas, rábanos, zanahoria, remolachas, canónigos, rúcula

También es un buen momento para plantar los ajos, bulbos de cebolla, garras de espárrago y la patata temprana.

Durante este mes de febrero, si sembramos o plantamos a finales de otoño, estaremos recolectando espinacas, acelgas, habas, apio, diferentes tipos de coles, alcachofas, etc. propias de estas fechas.

Aunque el clima invite a ello, es un buen consejo esperarse a plantar las primeras habas, tomates, pimientos, berenjenas… aunque los plantemos un poco más tarde, su crecimiento será más rápido y tendremos pronto las primeras producciones, sin necesidad de correr riesgos de heladas tardías.

En cuanto a plagas, aparecen los primeros pulgones, sobre todo en las habas, en este caso el pulgón negro. Trataremos a ver los primeros insectos porque obedecen a la primera generación y si no se controlan adecuadamente se multiplicarán rápidamente. Cuidado con los insecticidas utilizados, si son biológicos o ecológicos mucho mejor. Y siempre respetando los plazos de seguridad.

Frutales en el huerto urbano en febrero

Se nos termina el tiempo para la plantación de frutales a raíz desnuda: albaricoqueros, cerezos, ciruelos, perales, manzanos, caquis, paraguayos, etc. son frutales que pueden ser plantados a raíz desnuda. Pero recordemos que si están en contenedor, los podemos plantar durante todo el año. Por ejemplo, en el cultivo del arándano la época de plantación más adecuada se sitúa durante el periodo de finales de otoño y principios de invierno, mientras la planta se encuentra en reposo vegetativo.

Naranjas maduras

También es un momento límite para realizar sus podas. Si los tenemos tutorados en cordón o palmeta, es importante revisar todas sus ramas atadas y si han engordado hasta el extremo de correr riesgo de estrangulamiento, las desataremos y volveremos a atar correctamente.

Febrero es un mes donde comienzan a florecer algunos de los frutales de hueso y pepita, en especial los almendros ¡son todo un espectáculo!

Es un buen momento para eliminar las malas hierbas del campo e incluso para aportar estiércol o materia orgánica, que removeremos ligeramente para incorporarla al terreno.

Ciertas variedades de cítricos siguen ofreciéndonos sus frutos llenos de zumo y aroma.