La alcaravea es una planta normalmente bianual, cuya altura alcanza casi el metro y destaca por su potente olor a anís. Sus hojas crecen de forma alternas, son de color verde brillante, finamente divididas mostrando un aspecto plumoso. Sus flores son de color blanco o rosa. Florece desde finales de primavera a pleno verano. Su fruto suele confundirse con el comino, si bien la semilla de la alcaravea es más larga, sin pelo y estrecha.

Carum carvi

Conocida popularmente como alcaravea, comino de prado, hinojo de prado, carvia, alcarabia o alcaraveta, su nombre científico es Carum carvi L. y pertenece a la familia Umbelliferae o Apiaceae.

Siembra de la alcaravea

La siembra de la alcaravea es directa en el campo y puede realizarse tanto en primavera como en otoño. Y se realiza directamente en el terreno de cultivo porque es una planta que soporta mal los trasplantes.

Tras la siembra, su nascencia tiene lugar en un periodo de unos 15 a 20 días. Una vez germinada se debe dejar una distancia entre las plantas de unos 20 centímetros. La alcaravea puede ser invasiva, tendiendo a reproducirse espontáneamente por su propia semilla, de ahí que se tenga que vigilar su propagación.

Recolección de la alcaravea

Su aprovechamiento se centra en sus semillas y raíces. Su floración se produce durante el segundo año, hacia finales de mayo, comenzando a madurar los primeros frutos a mediados de julio, momento en el que comienzan a tener un color pardo oscuro.

Su recogida se realiza en el momento en el que las semillas empiezan a madurar, cortando las plantas a ras del suelo.

Estas plantas se cuelgan en manojos en un lugar seco y ventilado para recoger más tarde las semillas maduras que caen.

Las semillas de alcaravea participan en la mezcla de especias que componen el curry. Solas se utilizan para aromatizar panecillos, quesos, en confitería, las marinadas, carnes grasas asadas, etc. También se utiliza en la industria farmacéutica y perfumería.

Necesidades para el cultivo de la alcaravea

El tiempo de duración de un cultivo es de dos años. Es una planta xerófila que vegeta bien con escasez de agua, por lo que sólo se recurre a su riego cuando no llueve durante un largo período de tiempo.

Es una planta de clima templado y prefiere el ambiente fresco y si puede ser con algo de sombra.

Los suelos deben tener buen drenaje, ser profundos, francos, mullidos y algo calizos, aunque también vegeta bien en suelos silíceo-arcillosos, arcillo-arenosos y frescos.

Plagas y enfermedades de la alcaravea

En cuanto a plagas y enfermedades, la alcaravea es muy rústica, si bien, en campo abierto es atacada por roedores como ratones y conejos. También sufre daños provocados por las larvas de algunos coleópteros y lepidópteros.