El ajo, ese pequeño bulboso de sabor fuerte y penetrante, ha sido una joya culinaria a lo largo de la historia. Conocido científicamente como Allium sativum, pertenece a la familia de las Liliáceas (Liliaceae).

Originario de Asia Central, este condimento ha trascendido fronteras y se ha convertido en un elemento esencial en cocinas de todo el mundo. Con una historia que se remonta a miles de años, este vegetal ha sido cultivado y consumido en civilizaciones antiguas como la egipcia, la china y la romana. Su sabor distintivo y su capacidad para realzar los sabores de otros ingredientes lo convierten en un elemento clave en la gastronomía mundial.

Existen dos variedades principales de ajo: el ajo blanco y el ajo morado. El primero, de sabor más suave, es comúnmente utilizado en la cocina europea, mientras que el segundo, de sabor más intenso, encuentra su hogar en las cocinas mediterráneas y asiáticas.

Este último tiene en España uno de los más reconocidos a nivel mundial e internacional, el Ajo Morado de las Pedroñeras. Este excelente producto se cultiva en la comarca del mismo nombre de la provincia de Cuenca, así como en 277 municipios más repartidos en las provincias de Albacete, Ciudad Real y Toledo, todas ellas pertenecientes a la comunidad autónoma de Castilla-La Mancha.

El ajo es un ingrediente estrella en muchos platos tradicionales. Desde la clásica salsa alioli en la cocina española hasta el ajo asado en la vecina Italia, esta especia despierta los sentidos y añade carácter a las recetas más icónicas. Es muy común encontrarlo en platos típicos de la mayoría de los países del mundo.

Como ingrediente en muchas recetas gracias a su versatilidad se puede utilizar tanto en su forma cruda como cocida. Ya sea en salsas, guisos, adobos o aceites aromatizados, este bulboso añade profundidad y complejidad a una amplia variedad de platos.

El ajo se comercializa en diversas formas, fresco, seco, en polvo o en forma de aceites y extractos. China, India y España son algunos de los principales productores a nivel mundial, abasteciendo los mercados con esta especia de alta calidad.

Usos y beneficios del consumo del ajo.

En muchas culturas, el ajo se considera un talismán culinario y se utiliza no solo por su sabor, sino también por sus contrastados beneficios para la salud. Desde la antigüedad, se le ha atribuido propiedades medicinales. Es por ello que la inclusión regular de ajo en la dieta es un habito saludable para la mayoría de las personas.

Tiene propiedades antibacterianas, antioxidantes y antiinflamatorias. Su consumo moderado contribuye a la salud cardiovascular, la reducción de la presión arterial y la mejora del sistema inmunológico.

Es un antibacteriano, antiviral y antiparásito natural, por lo que fortalece el sistema inmunológico. Entre sus principales vitaminas se encuentran la B1, B2, B6, C y E. Rico en calcio, fósforo, y potasio, contiene además en menos proporción hierro, magnesio, zinc, cobre, manganeso, selenio y sodio.

Pollo al ajillo

Recetas y platos principales que utilizan el ajo.

Como especia indispensable en la cocina global tanto como ingrediente principal o como acompañante, el ajo continúa deleitando paladares y aportando su distintivo toque a la diversidad culinaria que caracteriza muchos platos de la gastronomía mundial.

Son muchos los platos donde el ajo les confiere una identidad propia, por lo que no cabe una alternativa a su uso como ingrediente en ellos. Entre los más populares destacamos el gazpacho, salmorejo, ajoarriero, sopa de ajo, pollo al ajillo, bacalao al pilpil, también para preparar la famosa salsa alioli para acompañar carnes a la brasa, pescados, patatas y arroces. Imprescindible en la rica salsa al pesto para acompañar platos de pasta, o en ricas vinagretas para aderezar ensaladas y moluscos.

Como ingrediente destacado en las cocinas de todo el mundo, y en concreto en la mediterránea, donde ha sido siempre muy apreciado, el uso del ajo y su producción sigue aumentando gracias al interés cada vez mayor de probar sabores distintos y elaborar platos de los demás países que conforman la gastronomía internacional.

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