El Kaki es un frutal tropical que podemos cultivar en nuestro huerto urbano de campo, siempre y cuando la climatología sea de inviernos suaves. Su fruto es de color más o menos anaranjado y se consume como fruta fresca, aunque también se puede emplear en pasteles o mermeladas.

El Kaki tiene como nombre científico Diospyros kaki, como nombre muy común el Caqui y pertenece a la familia de las Ebenáceas. Es una fuente importante de vitaminas A y C.

El árbol del kaki debe de mantenerse en las dimensiones deseadas mediante podas, ya que en estado libre puede alcanzar casi los 20 metros de altura. Posee pocas ramificaciones.

Sus hojas de color verde son caducas, ovaladas y algo pilosas en el envés. Cuando llegan los fríos, el color de sus hojas varía del verde a rojo anaranjado.

El Kaki posee varios tipos de flores: femeninas, masculinas y hermafroditas. Estas pueden aparecer en árboles con un solo tipo de flores o con más de uno. Estas flores se agrupan generalmente de tres en tres. Las femeninas son grandes, con pétalos verdosos y están dispuestas individualmente. Si queremos plantas varios Kakis en el huerto urbano, debemos asegurarnos de que la mayoría de ellos sean árboles femeninos, con alguno masculino que ejerza de polinizador.

La producción del Kaki la tendremos en el hemisferio norte a finales de año. Suelen perder sus hojas, dejando sus atractivos frutos anaranjados al descubierto.

En el mercado, podemos comprar plantones de Kaki para nuestro huerto urbano básicamente de dos tipos:

  • Diospyros kaki y el Diospyros lotus que se utiliza como patrón.- es un árbol que si bien puede alcanzar casi los 20 metros de altura, no debemos dejar que supere los 5 metros para facilitar su recolección. Ramifica muy poco y el porte es más o menos piramidal, aunque con la edad se hace más globoso.
  • Diospyros virginiana.- su cultivo no es tan frecuente y el consumo se suele realizar de árboles silvestres.