El regaliz es un dulce clásico y popular que no deja indiferente a nadie. Los hay quienes aman su sabor y degustan su raíz como una golosina, mientras que otros lo detestan. Es un producto que se vende en muchas partes del mundo y se puede consumir de diferentes formas: directamente masticando su raíz, como golosina prefabricada, en diferente formulados para su venta en farmacias, como aditivo a productos como el tabaco e incluso en bebidas que lo contienen como ingrediente.

Crece en tierras profundas, preferiblemente de tipo arcilloso y ribereñas. En condiciones óptimas llega a invadir los cultivos lindantes hasta el extremo que resulta muy difícil controlarlo. Alguno de los lugares donde podemos encontrar al regaliz fácilmente es en las cuencas del Ebro, del Tajo y del Jarama.

Glycyrrhiza glabra

Etimológicamente el nombre del género Glycyrrhiza proviene del griego, compuesto por ‘rhiza’ (raíz) y ‘glyks’ o ‘glukus’ (dulce), aludiendo el término de la especie ‘glabra’ a la ausencia de pilosidad.

Entre sus nombres más comunes están agarradera, alcancuz, alcarzuz, alcazul, alfendol, arresú, bena, erregaliz, fendoces, findoz, melosa, orojué, oroduz, palacazú, paliduz, paloduz, palulú, palo dulce, palodul, palitroco, regalicia, regalistia, regaliza, rogalicia, makilgoxo, regalensia, regaliz de palo o regalesia por ejemplo, siendo el de regaliz el más popular. Su nombre científico es Glycyrrhiza glabra aunque todos lo conocen como regaliz, pertenece a la familia Fabaceae y tiene su origen en zonas de la Europa Mediterránea y de Asia Menor.

El regaliz es una planta de porte herbáceo de hojas perenne y con raíces estoloníferas lo que indica que estas se extienden horizontalmente y por su capacidad de rebrotar ayuda a su propagación vegetativa. Estas raíces cilíndricas, rastreras y de color pardusco, alcanzan una longitud de más de dos metros y son emitidas año tras año. Precisamente son la parte de la planta que se recolecta durante el periodo otoñal a partir de los tres años de edad del regaliz. Estas raíces se cortan en trozos de unos 20 ó 25 centímetros, se lavan y se conservan en lugares secos y bien aireados hasta su comercialización.

Las hojas del regaliz crecen de forma alterna, son pinnadas con una longitud que varía entre 8 y 16 centímetros. Son hojas de color verde están compuestas por 9 a 17 foliolos ovales, enteras y son un envés muy pegajoso.

Sus flores aparecen entre los meses de mayo y julio, creciendo agrupadas en racimos de entre 8 a 12 centímetros y compuestas por pequeñas inflorescencias de color púrpura o azul pálido.

Tras su fecundación aparece su fruto, una legumbre en forma de vaina típica de la familia Fabaceae, con una longitud de entre uno y tres centímetros que, con tres o cuatro semillas están listas para recolectar durante el otoño.

Regaliz

Historia del regaliz

Si nos remontamos a la historia del regaliz lo haremos sobre unos 2800 años antes de Cristo, puesto que se documenta su utilización en la elaboración de productos para la salud en china y tibetana de aquella época. Más reciente son las observaciones donde se indicaban las propiedades curativas de la raíz de regaliz encontradas en la tumba del faraón egipcio Tutankamón allá sobre 1350 antes de Cristo.

Propiedades del regaliz

La raíz del regaliz es uno de los condimentos más antiguos. Su sabor anisado y agridulce le permite utilizarse en ámbitos tan distintos como en la confitería, postres, tartas, dulces, bebidas y por supuesto directamente el masticado y chupado de sus raíces. Con los extractos de sus raíces se fabrican caramelos, comprimidos y tiras de oblea que son vendidos según el producto en farmacias y puestos de golosinas. Su característico y agradable sabor, sus propiedades para eliminar el mal aliento, es también utilizado como ingrediente del tabaco oloroso dulzón de pipa.

Por su alto interés curativo aplicado, actualmente existen importantes zonas de cultivo de regaliz en áreas como el valle del Ebro lindando su cauce desde Navarra hasta Tarragona. Otras zonas peninsulares de España son las cuencas de los ríos Tajo y Jarama, sobre todo en las provincias de Madrid, Toledo y Guadalajara.

Los amantes de los productos naturistas destacan sus efectos beneficiosos ante diferentes afecciones como úlceras estomacales, dolor de garganta, tos, resfriado, reflujo, ayuda a la digestión, al estreñimiento y reponerse de infecciones virales, por ejemplo.

Entre los principales componentes activos del regaliz se citan los ácidos salicílico, málico, betulínico y glicirrético; los aminoácidos como la asparagina; los azúcares glicirricina, glucosa y sacarosa; el betacaroteno; los flavonoides como el licoflavonol, licoricona, glicirol, glizarina, formononetina, propenilanilosa, isoliquiritigenina, glabrol, glabrona, …; los minerales de calcio, cromo, cobalto, fósforo, magnesio, potasio, silicio y sodio; y vitamina C y tiamina.